Hay amores que terminan sin decir adiós. Este texto es una reflexión íntima sobre las despedidas silenciosas, lo que queda cuando el amor se va y el proceso de reencontrarte contigo misma. Un viaje emocional entre pantuflas rosas, playlists de domingo y la certeza de que a veces, quedarse sola también es una forma de volver a empezar.